Lo que tienes que saber sobre los «links» en tu web.
14 de enero de 2022¿Estás arrancando un negocio propio? ¿Eres profesional y te gustaría darte a conocer más y mejor y así obtener más ventas? Fotógrafos, escritores, artesanos, coach, psicólogos, nutricionistas, profesionales del sector de la construcción o agrícola... ¡Da igual! Si tienes un negocio NECESITAS UNA PÁGINA WEB. ¿Que no? Que síiiii. ¿Que ya tienes redes sociales? Y ¿qué? No es suficiente. Lee este post y terminarás ya no necesitando una web, sino QUERIENDO TU WEB.
A menudo escucho esto de: "No, si yo con las redes sociales tengo suficiente" o esto otro de: "ya no se estila lo de tener web, ahora son las redes las que imperan". Bueeeeeno, permitidme que lo ponga en duda.
Desde mi punto de vista, tanto como usuaria de redes sociales como alguien que se dedica también a crear contenido en ellas para diferentes empresas y organismos, diré que para mí las redes sociales son sinónimo de inmediatez, velocidad, efímero, pasajero. Con esto no digo, ni mucho menos, que no sea importante nutrir nuestras redes sociales, lo es y más hoy en día que el consumo de información es tan rápido, constante y precisa de una gran capacidad de actualización. Ahora bien, ¿es suficiente con publicar asiduamente en nuestras redes sociales para conseguir ventas? Ojo, que hablo de ventas que no de visitas, likes, etc. A mi entender, NO, no es suficiente. El apoyo de una web en condiciones puede ayudar y mucho. Y en este post trataré de mostrarte cuáles son las ventajas y en qué puede beneficiarte a ti y a tu negocio.
Redes sociales:
el señor que vendía la enciclopedia puerta a puerta
VS.
página web:
la familia que llamaba a la empresa de venta de enciclopedias para comprar una.
Vale, sí, lo sé. Este titular es un poco... raro (además de largo). Seguro que en cuanto te lo explique entenderás la comparativa.
Cuando trabajamos con redes sociales (me refiero fundamentalmente a Facebook e Instagram, aunque esto puede extenderse a otras como X o YouTube) y las llevamos nosotros mismos, es decir, no contratamos a un especialista, no solemos tener seguidores cualificados, o sea, nuestro público comienza siendo el formado por amigos, familiares, algunos negocios próximos, etc. Paso a paso, vamos añadiendo nuevos seguidores, muchas veces sin examinar a quién estamos aceptando o a quién no, es más importante aumentar el número de "amigos" que pararnos a pensar si esa persona/s es o son un público objetivo del servicio o negocio que quiero vender. Cuando en nuestras redes lanzamos un post, un reel o una historia, llega a x personas y la pregunta aquí es: ¿cuántas de esas personas están realmente interesadas en lo que les estás contando? Muchos, probablemente la mayoría, pasarán de largo tu publicación, sin leer el texto que acompaña tu post. Y quizá, solo quizá, alguien contacte contigo porque le interesa el servicio o producto que has publicado. ¡Genial, si es el caso! A mí esto siempre me ha recordado a aquella pareja o aquel señor o señora que iba puerta por puerta tocando, tratando de vender una enciclopedia. ¿A cuántas puertas tenía que llamar para conseguir que una de aquellas familias le dijese que sí que querían la enciclopedia? Es lo que en ventas se denomina "venta a puerta fría". Tú lanzas el mensaje y cruzas los dedos para ver si alguien te lo compra. Otra cosa diferente es cuando tenemos unas redes sociales mucho más especializadas, en donde amigos y seguidores son personas a las que les interesan nuestros servicios o productos y son clientes habituales. Para llegar a esto se requiere bastante tiempo y, en mi opinión, un profesional encargándose de nuestras redes.
Si lo de antes era la venta a puerta fría, seguro que intuyes que lo contrario es la página web. Y querrás saber por qué. Bueno, en primer lugar, vamos a eliminar las visitas de los familiares y amigos que entraron el dia que tu web salió a la luz en el inmenso océano de internet. Más allá de esto, la pregunta es, si no es mi familia ni mis amigos, ¿quién visita mi página? Las visitas a una web pueden proceder de diferentes canales de adquisición, algunos de ellos:
- Directos: son aquellas visitas recibidas porque alguien escribió directamente la dirección de tu web en el navegador (aunque también son visitas procedentes de lugares que no han podido ser rastreados). Como decía antes, si exceptuamos a familiares y amigos, se entiende que alguien que tecleó tu dirección URL es porque tiene interés en saber de tu negocio, ¿no? Por lo tanto, lo normal es que pueda formar parte de un público más o menos cualificado.
- Redes sociales orgánico: son las visitas que proceden de enlaces en historias, post, etc. en tus redes sociales. ¿Son también cualificadas estas visitas? Pues... en el tiempo que llevo dedicándome a analizar el tráfico de diferentes webs, he visto que, más a menudo de lo que les gustaría a los dueños, estas visitas generan un aumento de la tasa de rebote. La tasa de rebote mide el tiempo que permanece un usuario en nuestra página. Cuando alguien se ha equivocado y ha clicado un enlace, inmediatamente se sale, y esto hace que nuestra tasa de rebote aumente, lo que a Google le lleva a pesar: "pues vaya una porquería de página que la gente entra y se marcha". Así que, a menudo, las redes sociales (por no tener seguidores a los que de verdad les interese lo que tenemos que contarles) nos perjudican en posicionamiento. También hay excepciones, por supuesto. Hay personas que ven una publicación y quieren saber más. ¡Wuala! Un dato a tener en cuenta, ¿no crees? A alguien le llegó tu publicación, sin embargo, antes de decidirse por tu producto o servicio quiere tener más información... Y para eso está TU WEB. Luego llegamos a esto.
- Redes sociales publicidad: si inviertes en publicidad en las redes sociales, en principio, tus publicaciones aparecerán ante personas a las que, en principio, sí pueden estar interesadas en lo que ofreces. Aunque no me voy a extender en este apartado. Lo mismo serviría para Google Ads.
- Búsquedas orgánicas: es cuando un usuario está buscando información sobre un articulo o un servicio y tu web aparece en la lista de resultados y el usuario accede a ella. Conseguir que tu página aparezca entre los principales resultados es el laborioso trabajo que realizamos los que nos especializamos en optimización SEO. Es importante diferenciar diferentes tipos de búsquedas orgánicas:
- Informativas: son búsquedas del estilo de: diferencias entre el BMW serie 5 y un Audi Quattro, o ventajas de tener una página web, o servicios en los pueblos de la Sierra Norte de Madrid, o los mejores restaurantes para celebrar Nochevieja. En las informativas buscamos eso, información, sobre un asunto que nos interesa, puede que tengamos intención de adquirir algo, aunque puede que no o que si lo hacemos sea a largo plazo. Nos estamos documentando. En este tipo de búsquedas juegan un papel muy importante los post de nuestro blog. Toma nota de esto para tu futura página web.
- Adquisición: cuando ya he terminado de documentarme, tomo la decisión de comprar y para ello empiezo a formular otro tipo de preguntas en el buscador como: precio oferta BMW serie 5, o agencias de diseño web en Valladolid, o casas baratas para rehabilitar en la Sierra Norte de Madrid, o precio medio cubierto restaurante La Platja en Nochevieja. Aquí ya no es importante el blog, aquí son nuestras páginas de servicios, nuestra Home, las encargadas de que ese usuario interesado, decida comprarnos a nosotros el producto o contratar nuestro servicio.
- Mixtas: a veces aparecen las dos intenciones en las búsquedas.
Dicho todo esto, que espero que sirva para dejar claro lo siguiente: si tenemos una web hecha en condiciones, con cierto nivel de optimización (para las búsquedas orgánicas), lo normal es que si alguien da con nuestra página es porque está interesado en algo que tenemos. No tendría ninguna lógica que si yo tengo una web sobre productos deportivos le aparezca a alguien que está buscando campamentos de verano, ¿no? O sea, que pensemos que quien llega a la web es porque o bien quiere saber más sobre nuestro negocio (se quiere informar) o bien ya tiene la información y está en el proceso de adquisición.
¿No llega nadie a quién no le interese un pijo nuestra web? Sí, claro, ya lo decía antes hablando de Redes Sociales como canal de adquisición, a veces ocurre y no es algo que nos favorezca, sin embargo... esto es así. Por eso es muy importante optimizar nuestra web. Ya no solo para tratar de ser más visibles (que por supuesto es fundamental) sino también para que se nos encuentre por lo que queremos que se nos encuentre, lo demás... nos perjudica y mucho.
Para concluir este apartado de los señores vendedores de enciclopedias, la página web sería, para mí, cuando una familia decide llamar por teléfono a una empresa o a varias que se dedican a la venta de este producto y quieren conocer precios o formas de pago, plazos de entrega, etc. Ya hay una intención de compra. Que te lo compren a ti o no... ya es otro tema.
10 Beneficios/Ventajas de tener una web además de redes sociales
Para mí, hay al menos diez razones por las que cualquier negocio, sea del tipo que sea, debería de tener una página web actualizada (en diseño e información), moderna, útil, adecuada en definitiva para los productos o servicios que quiera vender. Y aquí van:
1.Tu página web muestra tu profesionalidad y te otorga credibilidad:
defiendo la idea de que: si no estás en internet no existes. Si un día estoy jugueteando en mi Instagram y me llama la atención un anuncio de, por ejemplo, una academia de inglés especializada en facilitar el aprendizaje a los adolescentes con problemas para aprobar la asignatura, y quiero tener más información (porque, nos guste o no, las redes sociales nos dan una información muy limitada y hasta puede que ni encontremos lo que estamos buscando porque esté en un post de hace diez meses...) lo normal es vaya al navegador, introduzca el nombre de la academia o su dirección para ver su web (además de buscar reseñas sobre sus servicios, su trato, sus logros, etc.). Aquí pueden ocurrir varias cosas:
¿No tiene página web?
la sensación de que la academia no tenga web, hará que en mi mente se despierte la duda de si, siquiera, la academia sigue funcionando, porque hoy en día... ¿cómo no van a tener página web? Además me quedo sin la información que quería. Es posible que la encuentre en las búsquedas, aunque ya me va a tocar estar más tiempo, ¿tú tienes tiempo? Yo quiero toda la información en el mismo sitio y si después necesito obtener información de otras fuentes, ya lo haré yo porque así lo decida, ¿no te parece? Y no porque no me quede más remedio. Así que, sin web, su profesionalidad y su credibilidad y mi sensación de ser un negocio actual y actualizado... merman, merman mucho.
¿Tiene una web obsoleta, anticuada, de hace años?
¿seguirán funcionando o habrán cerrado el negocio? de nuevo esa pregunta asoma a mi cabecita. Es como si fueses por la calle andando un día a las cinco de la tarde y vas a una tienda de ropa y te encuentras un cierre de esos metálicos echado... ¿seguirá abierto y es que ahora tienen cerrado o ya no están? o si entras a una tienda de ropa en la que el suelo es de terrazo, la decoración del año de Mari Castaña, etc. ¿Qué sensación te transmite? A mí de pasotismo. Un negocio hay que cuidarlo, hay que mimarlo, hay que actualizarlo y da igual si es virtual o si es real. Todo nos entra por los ojos y nos hace generarnos una idea u otra.
¿Tiene una pasada de web, actual, moderna, bien organizada?
aquí sí, aquí podré navegar buscando la información que necesito antes de tomar la decisión de si ir a esa academia o ir a otra. Un buen diseño, acorde con el tipo de negocio, con el estilo... Una buena organización de contenidos, en donde pueda localizar lo que busco de manera rápida, hará que la imagen que me haga de esa empresa o negocio sea relacionada con la profesionalidad y con la credibilidad e, incluso, si comparo la web con otras de su sector... puede hasta que piense que es la más actual y por lo tanto entiendo que su negocio está actualizado a las necesidades de hoy en día de los adolescentes y sus circunstancias.
2.Control del diseño y del contenido de tu página web:
las redes sociales nos limitan a la hora de diseñar y de insertar contenido y más todavía limitan al usuario para encontrar un determinado contenido. En la web tú puedes organizar el contenido de la manera que consideres mejor (aunque es importante que te dejes asesorar por la persona encargada de realizarte una web profesional) y lo mismo ocurre con el diseño. Además, en las redes sociales es fácil distraerse con otros anuncios o publicaciones y que el usuario abandone las tuyas e, incluso, que ya no regrese. Si dio contigo por casualidad recordar tu nombre puede ser una proeza.
3. Elementos de venta en tu página web:
la tienda online te permite vender tus productos e incluso tus servicios. El porfolio te permite mostrar tu trabajo y mantenerlo actualizado. Puedes realizar la venta de tus productos sin gastar en comisiones como ocurre con las redes sociales (aunque las comisiones del banco no hay quien se las quite de encima...).
4. Con tu web ofreces más facilidad de contacto:
el poder organizar los contenidos facilita la búsqueda de información a los usuarios y lo mismo ocurre a la hora de exponer tus horarios, tarifas, ubicación, etc. No hay página que se precie sin una sección de contacto en la que de manera fácil y visual tienes todas maneras de contactar en el mismo lugar. En las redes no funciona así... y lo sabes.
5.Tu web depende menos de los algoritmos que tus redes sociales:
en las redes sociales, para que tus publicaciones aparezcan, dependes de algoritmos que hacen que tu alcance orgánico (que no de pago) sea más limitado. En las webs depende del trabajo de un especialista en optimización SEO on page y off page, pero aquí hay libertas absoluta de trabajo y más facilidad para que tus páginas aparezcan en los resultados de búsqueda de los buscadores (pero tampoco vayas ahora a pensar que esto es coser y cantar...).
6.Tu página web te ayuda a crear tu marca:
puedes crear una marca sólida y apoyarla en tu página web. A diferencias de las redes sociales que a la hora de diseñar los paneles no dan muchas opciones, en tu web se pueden hacer infinidad de cosas. La selección de los colores, de tipografías, el estilo, el tono, etc... van dando solidez a tu marca.
7. Accesibilidad universal a tu negocio en la red:
¿crees que todo el mundo tiene redes sociales? Pues déjame que te diga que no. Hay mucha gente que se sigue resistiendo a abrirse una cuenta en Instagram, en Facebook, etc. E incluso, hay bastantes personas que han decidido darles un portazo (especialmente porque suelen llevar aparejado cierto nivel de dependencia). Otras veces, encontramos gente que antes tenían cuatro o cinco redes sociales y que, poco a poco, las han ido dejando de lado hasta quedarse con una o dos, si llega. A tu web puede acceder todo el mundo, sí, sí, solo es necesario un dispositivo y una conexión a internet. Ya está. Sin crearte un perfil ni nada de nada. Entrar, ver, leer, comprar y salir.
8.Tu web no genera dependencia:
navegar por tu web o por las webs no genera dependencia (o no tanta) como hacerlo en las redes sociales. Esta dependencia tampoco es la mejor aliada para hacer nuevos clientes, a menudo se miran las publicaciones como si fuésemos autómatas... sin más. Una, otra, otra, otra... Ahora entro, luego salgo, luego vuelvo, pero ya no sé ni a qué he venido...
9.Tu web perdurará en el tiempo:
Ya ha ocurrido y puede volver a ocurrir. A veces, una red social pierde popularidad y le toca cerrar o disminuye considerablemente el número de usuarios activos. Y tu cuenta, aquí se vería perjudicada, y ya no digamos si es por cierre... Imagina todo tu portfolio en Instagram y que la red eche el cierre... Tu web seguirá estando ahí, esperando a que le añadas nuevo contenido, que borres el antiguo si quieres, que cada x años le hagas un lavado de cara como quien pinta las paredes de su restaurante. Seguirá ahí (siempre que pagues el hosting y el dominio y no te cargues la web por tocar donde no se debe...), acompañándote y mostrándole a los usuarios todo lo que tienes que ofrecerles.
10.Análisis y posicionamiento de tu web:
las webs permiten un análisis de los datos de tráfico mucho más profundo que las redes sociales, esto te puede llevar a entender el comportamiento de los usuarios, qué puede fallar en una venta, cuáles son las páginas que más atraen a los usuarios y más les retienen... Además, puedes invertir en posicionamiento orgánico (SEO) lo que te ayudará a mejorar tu visibilidad. Y aquí sí, y por eso quería finalizar con este último punto, las redes sociales se pueden convertir en un buen ayudante a la hora de aumentar el número de usuarios que llegan a tu web Y SE QUEDAN.
Redes sociales como elementos de apoyo a tu web
Para mí, por si no ha quedado claro del todo, el orden es claro: primero una web, luego las redes (y a ver qué redes...). Las razones... te las enumero aquí:
- Post: si tienes un blog y escribes o te escriben post regularmente, las redes sociales son un maravilloso lugar desde el que promocionarlos y que los usuarios se animen a acceder. Un buen reel, una historia o un post en Instagram, Facebook o cualquier otra red social, que sea atractivo y que enganche para hacer que el usuario accede a través de un enlace al post publicado en la web. Ventajas: si le interesa el tema sobre el que has escrito, genial, el conocimiento no tiene lugar y seguro que has resuelto dudas o le has generado ganas de saber más; si le interesa el tema sobre el que has escrito permanecerá en tu web leyendo el post lo que hará que disminuya la tasa de rebote y aumente el tiempo de permanencia (a mayor tiempo de permanencia con mejores ojos te mirará San Google y más posibilidades de que te dé visibilidad tendrás); si le gusta el tema, el tono, etc. puede que decida leer cada vez que escribes algo, así que estarás fidelizando a ese usuario. A través de los post puedes dar a conocer nuevos servicios o productos, ofreciendo mucha más información, resolviendo dudas de los usuarios, hablando de ventajas y desventajas, etc. Ah y cuando haya pasado un tiempo podrás republicar tu post y será como si lo acabases de escribir. Pero es fundamental publicitar ese post, porque, a menos que seas un crack en SEO, tu post puede tardar tiempo (bastante) en salir en las búsquedas orgánicas relacionadas con el tema sobre el que hayas escrito.
- Presentar novedades: los cambios que realices en tu web, los productos nuevos, incluso la apertura de esta, son hechos que podrás contar a través de tus redes sociales y que irán dando a conocer tu marca y tu web. Recuerda incitar siempre a navegar por tu página a aquellas personas interesadas de verdad y pon las cosas fáciles. Si estás sacando un determinado producto o servicio y pones un enlace... no lo hagas a la home y que el usuario se busque la vida, porque como no lo encuentre en tres segundos se va a marchar y le estarás perdiendo. Enlaza siempre al lugar concreto y si el usuario así lo desea, ya navegará por tu web cuando quiera.
- Tus publicaciones en la red pueden atraer a usuarios interesados en tus productos o servicios, enlaza siempre con tu web por si quieren localizar más información. Todos queremos las cosas para ayer, hacer buscar en un buscador una página es perder el tiempo, puede que cesen de hacerlo y pierdas su inestimable visita y, quién sabe, una posible venta.
- Genera contenido rápido para tus redes sociales, genera contenido duradero para tu página web. Si no tienes tiempo de actualizar información en tu web, siempre podrás subir el contenido a la red y darte un margen de tiempo a ti o a la persona que lleve tu página para actualizar la página.
- Si obtienes datos relevantes de visitas, de compras, etc., no dudes en darle publicidad a través de tus redes sociales.
- Las redes sociales forman parte del SEO off page (es decir, el trabajo de optimización fuera de la página). Por eso es importante que ambas cosas vayan a la par, tengan coherencia entre sí, exista cierto grado de retroalimentación y se mantengan actualizadas. Y, sin ningún tipo de duda, si quieres obtener los mejores resultados en el SEO offpage, déjalo en manos de un/a especialista. "Zapatero a tus zapatos", decía mi abuela.
Y, después de este montón de palabras... te pregunto ¿sigues pensando que con tener redes sociales es suficiente para vender tus productos o servicios?
Si te han quedado dudas, si tienes más consultas o si, por el contrario, quieres ponerte manos a la obra ya y no sabes por dónde empezar.
LLÁMAME Y HABLAMOS, ME CUENTAS, TE CUENTO Y VEMOS QUÉ HACER
(Venga, que esto es totalmente gratis ;)